Sin duda alguna, si usted es un creyente nacido de nuevo su deseo es vivir conforme al amor…no lo puede evitar, pues es parte de su nueva naturaleza. Pero sólo con anhelarlo no es suficiente. Es necesario que tome una decisión de calidad para ¡cumplirlo! Primero, determine de antemano obedecer lo establecido en Efesios 5:2; y de manera constante base su comportamiento dentro de la esfera del amor. Note que mencioné: de antemano. Si usted espera hasta enfrentar una situación difícil para decidir cómo responder a ésta; sin duda alguna, tomará una decisión equivocada. Y en lugar de gobernar su comportamiento por medio de la ley del amor, al final permitirá que las circunstancias; incluso, el mismo diablo lo gobierne. Por tanto, prepárese ahora para enfrentar lo que viene. Si existe alguien en su vida, a quien es muy difícil amar, conviértala en un proyecto especial. (Por lo general, ese tipo de persona necesita más amor que cualquier otra). Realice planes para no sólo « tolerarla », sino que esfuércese por ser amable y amoroso con ella. Usted podría argumentar: « Pero Gloria; usted no la conoce como yo. Sería demasiado difícil amarla. Yo no puedo lograrlo ». ¡Sí, usted puede amarla! Porque es un discípulo del Señor Jesús. Usted se encuentra lleno del Espíritu Santo y de poder. Y Dios ha sembrado en su corazón Su mismo amor, el cual nunca falla. Tome la decisión de darle hoy lugar a ese amor, y déjelo fluir. Luego comience a fortalecer su espíritu, alimentándolo con lo que la Palabra de Dios declara con respecto al amor. A medida que usted medite en esa Palabra, ésta le dará energía y creará en su interior el poder y el deseo de estar dispuesto a trabajar para agradar a Dios. La Palabra aumentará su capacidad de vivir en amor. Manténgase en una constante dieta bíblica. Contrarreste las voces mundanas y los deseos carnales que lo alejan del amor de Dios, llenando sus oídos y sus ojos con versículos como 1 Corintios 13. Léalos por la noche antes de dormir, y en la mañana al levantarse. Escríbalas en unas tarjetas y péguelas en el espejo de su baño, a fin de que pueda meditar en éstos mientras se cepilla los dientes. Si lo cumple, le garantizo que la Palabra cobrará vida en usted. Le hablará y le recordará su decisión de vivir en amor. Cuando se hastíe de alguien, y esté a punto de confesárselo; la Palabra le hablará y le recordará que el amor no es egoísta, ni resentido ni guarda rencor. Entonces, en vez de expresarle a esa persona lo que piensa, le dará el amor de Dios, y la bendecirá. Dios se agradará y ¡usted obtendrá la victoria! Job 29-30; Apocalipsis 14 Yo vivo en amor, de la misma manera en que Cristo me amó (Efesios 5:2).